domingo, 28 de diciembre de 2008

canción (última de 2008)

---



Ya voy a cumplir
otro año de extrañarte en cada melodía;
ya voy a cumplir
mil flashes de volver atrás en cada tarde gris.
Pero si lo miro como si fuera aquel chico arrepentido
pienso que lo que pudo haber sido
se ve mucho más brillante
de lo que esto es hoy.

No quise pedir
que volvieras conmigo apenas lo sentía
y me propuse el objetivo inapelable
de sufrir hasta sangrar (esta vez).
Los que fuimos y los que seremos se parecen en mi historia,
pero estoy perdido en este whisky
en las rocas que me recuer-
da tu boca hoy.

Y no vas a venir.
Yo lo deseo pero sé que no vas a venir.
Habíamos jurado escribirla juntos
a esta puta canción de adiós. Adiós.
Pero si no queda nada que decirte solo sólo canto un poco.
Mis canciones viejas sobran como
testimonio de lo que qui-
se decirte hoy.


Hasta aquí llegué.
Me despido de tu recuerdo y de tu olvido.
Me quedo solo con la triste grabadora.
Pronto me voy a descansar (¡al fin!).
Fumo y te recuerdo preocupada porque el pasto era un desastre.
Me dejaste un jardín y me enamoré
de las plantas pero lloro
cada día PORQUE TODAS SE MURIERON.

domingo, 21 de diciembre de 2008

domingo, 23 de noviembre de 2008

------------------------------------------------------------------------



Viajo en un micro sin ruido

viajo hacia un mundo sin viajes

viajo hacia un viaje más lindo

viajo en el tiempo y descubro
que el tiempo es nada y es viejo

nos veo: estamos moviéndonos por una línea
que se llama El tiempo
nos movemos sobre esa línea siempre
y siempre creímos que el tiempo no existía.

Pienso: si mi cabeza lo piensa
entonces debe ser cierto
del mismo modo, sin duda,
que mi cabeza me piensa
y yo vivo.

El espacio es la línea que cruza en un punto
aL tiempo que ya me acostumbra
no entiendo mil cosas, no obstante
publico mi conocimiento:
no hay tiempo que pueda vencer con los ojos abiertos.


Pero si jugar al sueño nos fuera permitido
Pero si tocar lo todo nos fuera vedado

ay que no cabría la duda de un alfiler en mi cabeza despierta

ay que no sabría qué hacer con todo mi entendimiento
ay qué no sabría yo bien por qué mierda seguir viviendo

y sin embargo
querría



ayer a la noche escribí en mi cabeza una página notable. ojalá que algún día regrese.

viernes, 14 de noviembre de 2008

jueves, 13 de noviembre de 2008

--------------------



qué dificil

explicar


que la felicidad en un solo viento
puede volarse

y reventar en mil pedazos


la tierra nos gasta la vida en pensar
que nada se entiende, que se entiende algo

la vida nos miente, nos dice
que el mundo da vueltas constante
da vueltas eterno
da vueltas preciso, movido
por un solo continuo movimiento

eterno
es el todo, nos dice
la vida, nos miente
y confiamos porque el mundo sin confianza no se mueve

el mundo visible es tan cierto

y si el mundo visible no sacia
es el mundo dificil el suelo
que nos hace pensar que sabemos
o que no sabemos y que eso también es sapiérere (-rérere-rérere...)

y nos miente, nos dice
mil cosas que solo disfraza
de anhelos
y en esa mentira nos sacia
un hambre y mil hambres de algo

y algo nos dice qué bueno
y algo nos queda temblando
me dicen mil cosas reales o mil aventuras
y yo todavía no sé por qué sigo escribiendo

pensar es glorioso
escribir es eterno

escribir es derroche
de tiempo, de energía puesta en marcha hacia un camino
de fotosíntesis



pensar es regalo y que levante la mano el que lo dude en algo

domingo, 2 de noviembre de 2008

No sé muy bien qué día es hoy (canción bien rockera)

---------------------------------------------



No sé muy bien qué día es hoy
y no sé bien ganas de qué tengo.
Te fuiste hace una hora y yo no he vuelto a ver el sol sonriendo.
Dijeron que era fácil mentir, decirte que el tiempo no pasa en vano;
lo cierto es que un proceso se acompaña
y lo alimento cantando.

Recuerdo con toda claridad el día cuando me confesaste
lo mucho que admirabas mis canciones y mi forma de hablarte.
Sentí muchas ganas de decir que a todos el futuro guarda un rescate,
pero lo dicho es humo y por lo visto nadie quiere escucharme.

Cuando la voz que manda me dice que no puedo,
me rebelo.
No sé de dónde saco que ya encontré mi lugar.

No sé muy bien qué día es hoy,
ni sé muy bien ganas de qué tengo.
Te fuiste hace dos horas y el tiempo se me escurrió escribiendo.
Dirás que no es la primera vez, pero es que vos me conociste el día que
yo empecé a estar contento, a cantar fuerte,
a vivir y a querer.

domingo, 5 de octubre de 2008

Como el río

-------------------------------------------------------------------------------------


Envejezco, mi amor; quiero contártelo.
Bajo un pie de la lancha y sube el sol.
El frío no es de verdad, es motor del calor
del recuerdo de alguna otra estación.

Pero te veo reaccionar ante el frío y pienso que
todo marcha, tengo lo que necesito,
y eso fluye como el río a nuestros pies.
Todo marcha: soy testigo atento del tiempo,
del cambio que opera adentro mío.

Poco a poco el calor va curando el dolor;
pienso: es como en la vida, debe haber un dios.
El tiempo va distinto y el paisaje es mejor;
sueño dentro de un sueño no existe sin vos.

Pero si te veo pensar un poquito temo que
todo caiga y yo no encuentre el sentido
para darle aire al tiempo y aguantar.
Todo cae: hay una ley que lo explica
y algo está atrasando mi caída.

Mi manera de ver es tan simple mi amor:
todo lo que va a ser ¿por qué no puede ser hoy?
Sé que voy a esperar, es un pacto el amor.
Nada quiero en la vida más que que sea con vos.

Y si me pongo a pensar en el muelle veo que
todo pasa, como dos hojas persiguen
ese punto donde el río es cielo.
Todo pasa: es sólo cuestión de tiempo
y de formar las figuras exactas.
Todo pasa. Sigo escribiendo unos versos,
"Pedro: no perdás el tiempo en eso".
Todo pasa, como el misterio del río
que, sin duda, fue el paso difícil de ésto.

Un poquito diferente de lo que fue

-----------------------------------------------------------------



Cada vez que canto una canción de amor por vos
me involucro con historias que no existen,
me confundo en los papeles que nunca reconocí
(los papeles que siempre quise vivir).

Todas las mañanas escribo una misma canción,
la canción de haber franqueado lo infranqueable.
Y si me despierta alguna pesadilla en vida
es un rato y vale mil veces lo que me da.

Y si la reescribo es solamente (de verdad)
una pauta egoísta que mal guía mi moral.
Pero sencillamente quiero ser un poco (nada más),
sólo un poco diferente de lo que fue todo.

Todo el mundo sabe que el amor no es propiedad
pero a mí me gusta verte así en mis manos.
Tu sonrisa despierta razones que ya había descuidado;
tengo el tiempo y tengo en que usarlo.

Hoy te canto con esa premisa de que ojalá
que ésta no sea la última canción.

Y si la reescribo es solamente (de verdad)
una pauta egoísta que mal guía mi moral.
Es que sencillamente quiero ser un poco (nada más)
sólo un poquito diferente de lo que fue todo.

lunes, 29 de septiembre de 2008

Vía conexión mental (canción de vísperas)

-------------------------------------------------------



Buenos días, vengo a interrumpirles.
Disculpen (las) molestias que posiblemente les cause
en lo que yo me demore.

Soy Pedro, ya ando por aquí hace bastante;
paseo y escribo discursos de nadie
que alguno disfruta.

Tengo un espacio para invitarte
a que te bañes conmigo
para lavarnos de la soledad
en que nos sumergimos y nos encontramos
bailando en el fuego, en mil grises praderas.
Tanta vida encubierta, qué pena me da.

Reitero mis ganas eternas de darte la exclusividad
del beso que cada mañana te mando vía conexión mental.
Y alguna vez seremos juntos una mancha en la gravedad.
Las letras que fueron la soga que nos ata nos confundirán.

Y ahora estoy transformado y me gusta inclinarme
para besar tu cintura. Locura
me invade si pienso en que pudo no ser.
Y el espacio se agranda con cada parpadeo,
y se pone más verde, más verde y más fértil,
y siempre tu viento me tiene despierto
cuando encuentro al viejo Pedro.

viernes, 26 de septiembre de 2008

tengo una nueva canción que publicar

-------------------------------------------------------------------------------------------------



el borrador quedó en mi casa
y es producto
de dos puntos la rabia
que me invade cuando no te
tengo cerca de las
cosas que te extraño si
camino por tu pieza y no te tengo.

tequieropedropedropedronuevopedrodel2mil8.

domingo, 14 de septiembre de 2008

Guillermo (canción)

-------------------------------------------------------------------------------------------------



Pensé: salvando las relatividades
a nosotros nos pasó casi lo mismo.
Aunque lo generacional

dibuje todo
con un barniz de nuevo,
ya se me nota en la cara que algo suyo adentro tengo.

Y se me notarán también alguna vez esas arrugas,
y también serán hechas con fuego de aventuras,
de vivir, de soñar vivir.

Nunca perdonaré a Roca lo del desierto
ni a los putos ingleses las Malvinas, mucho menos
al milico que le hizo sacar

la barba aquella vez para un tramiterío;
y en la barba que hoy yo le reflejo cuando nos vemos
se adivina el voto en contra

que él dio mucho antes que yo
hacia un viejo sistema
de hacer las cosas bien.

Gracias por escuchar tan aburrida,
esencial, egoísta manifestación
del orgullo que me da parecerme a él.

Y el destino va marcando a trenes
el mismo camino unos años después.
Y su vida se continúa en otras.
Toda su vida es un motor para mí.

domingo, 7 de septiembre de 2008

Pedro se sienta a escribir sin una idea

-------------------------------------------------------------------------------------



Pedro se sienta a escribir sin una idea. Sabe que debe escribir, que las cosas son así como se muestran a sus ojos. Sabe también que le cuesta escribir, que le cuesta y le gusta, y sobre todo le cuesta. Escribir fue alguna vez como un juego, pues Pedro sabía que sólo sentarse en la máquina blanca le daba la fuerza, le daba el empuje esperado, la maña en los dedos, el ritmo alocado que siempre marcó su adjetivo. Hoy se sienta pues sabe que el quince se acerca y que debe tener una historia, no tanto el dinero lo corre pero sí la gloria o la idea de gloria, sentir que mantiene la mano caliente. Está ya cansado de gastar sus huellas en teclas que brillan vacías, que escriben como de memoria las letras que un día supieron trocar las ideas en suaves y en duras palabras, en tantos minutos de ásperas voces leyentes.
¡Las primeras veces que escribía lo hacía tan mal! Hay en todas las cosas esa idea tan exacta de las capas como etapas que se deben ir pasando. Tan mal escribía, el tal Pedro, que si usted supiera hoy le daría el primer premio nomás por lo pernicioso de su empeño. Las cosas ya son para él sólo cosas. Su cabeza ha alcanzado la profundidad toda; escribir le ha dejado un tal vez triste hábito de pensar todo el tiempo en las cosas. Y pensar tanto en las cosas le despierta sensaciones inmediatas: que las cosas no son cosas, no son nada, son el sueño de que existen elementos regulares que organizan sus parámetros de vida, como los de cualquier otro. Los de usted también: esto piensa Pedro cuando escribe.
El concurso no le importa. Ganar es lindo siempre, pero un escritor que escribe mientras piensa en la derrota nunca gana la partida; y ese es Pedro. Pedro escribe, Pedro piensa, y en ningún momento nunca le preocupa el contenido. Es un escritor muy hábil, eso dicen cuantos lo conocen, que maneja sin problemas la sintaxis, manipula la palabra como tiempo detenido; se le nota que es un músico de aquéllos; cuando lee lo que escribe se hace sordo todo el ruido y si la gente no disfruta con su prosa sí disfruta con la cara de disfrute que comparte cuando lee.
Pero entienda que su gran inteligencia poco sirve para todo lo que traza los carriles que la vida sigue y reproduce todo el tiempo. Él lo sabe, y si un día le costó aceptarlo ahora es historia antigua, pasado pisado y todas esas cosas que se dicen de las cosas sin pensarlas. Hoy ya es lindo, es su orgullo y su romántico disfrute la conciencia de su ritmo estrepitoso, ese ritmo indescriptible, su moral y su apolítico desdeño por las normas que desde su propio origen se demuestran regularidades rotas por los genios más geniales de la historia.
Y por qué no, piensa el tal Pedro, romper con todo desde ahora, presentar en un concurso alguna historia sin historia, algún divague sin sentido, alguna mancha en mi conciencia que se vuelva viento, que se vuelque encima de la ropa de un jurado como un charco del café más poderoso de este siglo, de este siglo tan cortito, sigiloso, ¡ay! tan joven este siglo mentiroso como el padre siglo veinte que a los muchos que vivimos a su sombra nos dejó pegado el vicio de querer romper las normas sin sentido ni nostalgia, como viento, como viento fuerte y digno del disfrute de sentir que el desvarío se hace piedra y que ya nada, ni el hastío leopardiano ni la rabia de quien juzgue, ni uno mismo, ni siquiera uno mismo va a poder robarse aquella iniciativa que se tuvo de romper en unas líneas para siempre mientras ésto quede escrito aquella vieja norma madre que regula a cada hija y que dicta CASI siempre: que hay que hacer las cosas bien.

jueves, 28 de agosto de 2008

monólogo jugando a que es diálogo disfrazado de monólogo y de sus enriedos lógicos

-------------------------------------------------------------------------------------



¿o vos te pensabas que no me había dado cuenta de que siempre estás tan atenta?

sí, nena; son cosas que no se me escapan.

domingo, 24 de agosto de 2008

odio escribir como escribí ayer

-------------------------------------------------------------------------------------



Emilia, ya es público cuánto te quiero.
Quiero hacer público, sobre todo para vos, que pienso seriamente que puedo todavía seducirte con la idea de mi vida entre tu vida.
Si leés esto y te da por pensar que soy cualquier cosa que se te ocurra pensar, pensá que soy sincero, poco estratégico y eterno enamorado.
Te quiero mucho más que un te quiero,
Pedro.

sábado, 23 de agosto de 2008

empiezo a sentir cómo se acaban las cosas



y cada vez la muerte
me convenzo
me parece menos la última parte
del mejor orgasmo





empizo a sentir cómo pierden el sentido las cosas
y que no quiero seguir pensando así

chau

jueves, 21 de agosto de 2008

Vida en movimiento (el folklore es el espacio donde decir las cosas es puro)

-------------------------------------------------------------------------------------



Tengo un corazón que hace tiempo no desangra por nada. Cómo ha sido el tiempo que, al ratito de nacer, me enseñó que nada acaba. La mañana no empezaba aunque llovieran flores sobre mis dedos. Me lo ha confesado el río que se puede tocar bien si se sabe el instrumento.

Y yo ya encontré el mío; todos lo saben; vivo una vida en movimiento y no quiero detener

tantas palabras que germinaron entre tus besos y algún monólogo que dije o creí decir.

Tienes la gracia de trastornar un do, toda mi imperfección, siendo a tu sombra, se pone un poco linda y se puede disfrutar.

Como siempre, gracias!!




.-escrita con motivo del cumpleaños nº22 de Emilia y todas esas cosas que ya se saben.

domingo, 17 de agosto de 2008

Canción para Emilia

-------------------------------------------------------------------------------------



Me gusta imaginarte quieta y escuchando con atención.
Big bang! Que nazca una sonrisa de tu audacia y esta canción.
Me gusta ver tu diferencia en esta vida tan cansada de que todo sea igual.

Sabrá dios que nuestro proyecto es tan hermoso que nos junta otra vez?
Usemos tizas de colores para lo que dejamos en blanco ayer.
Sabés, mi voz es una cámara que filma todo lo que pasa y
yo ya no soy yo, soy un actor

que va paseando de tu mano por pasajes que nunca vi.
De a ratos te miro a los ojos, te digo algo, te ahgo reir.
Figuración del paraíso son tus besos, es cada momento
tuyo y mío, por lo menos hoy.

Yo canto para agradecer por cuanto te disfruto
pero por favor Emilia no te espantes.

Canción de amor

-------------------------------------------------------------------------------------



Es cielo y mar tu vida en mi vida,
sombra, pasto, fantasía y también realidad,
llanto y risa sos vos.

Me diste tu tristeza y tu alegría,
mis momentos en familia yo te compartí
y te quiero regalar

porque cuando estoy con vos
no me importa ni qué horas son
solamente quiero estar cerca de vos.

Cien mil momentos que yo no creía
que estarían en mi vida y que nadie me dio
hasta y desde que vos.

Por recordar tus labios de sonrisa
no censuro más y sacrifico esta canción
que hoy nació para vos

porque cuando estoy con vos
no me importa ni qué horas son
solamente quiero estar muy dentro de vos.

Si entiendo que tu vida es tu vida
pero a veces me entrometo es por acompañar. . .

Quiero crecer contigo

-------------------------------------------------------------------------------------



Se abre la puerta para mí. La conciencia despierta; va a pasarme.
Cuánto quisiera que el dolor fuera el dolor de un cuento. Y no creo.

Ya estoy acostumbrado a estar de más con los que más me gustan hoy;
yo quisiera que el mundo fuera así conmigo
Si estoy equivocado o no, no lo quiero saber, mejor así.
Quiero vivir la vida como la soñaba.

Quiero crecer contigo
Hasta llegar al cielo
Quiero crecer contigo
Quiero crecer contigo

El aire y su electricidad juegan con mi bigote a enfermarme.
Las flores a esta hora de la vida no se ven más que armadas y a futuro.

Este nuevo modelo va a pesar en mí pero quiero seguir
aquí siempre la vida me da una sonrisa.
Sólo quiero aclarar que no esperes transformación en mí, quiero llorar.
Convivo con un chico y no quiero callarlo.

Necesito tu ayuda
No me saques la mano
Quiero crecer contigo
Hasta llegar al cielo
Quiero crecer contigo
Y que juntos bailemos.

domingo, 10 de agosto de 2008

Soy amigo del pecado (samba borracha)

-------------------------------------------------------------------------------------



(canta con tono ligeramente deprimido y se va poniendo en clima de bronca oblicuamente)
No me diga que he callado.
No vengo a pelear y no pido perdón.
Mis mañanas he quemado meditando esta canción.
Soy amigo del pecado y ¡qué va a ser!

No me diga que he callado
si, mujer, yo no sentí traición.
Siempre estuve autorizado a probar (a discreción);
y la carne a veces manda (ya lo ve).

(quien canta cede nuevamente ante la angustia)
No me diga que he fallado,
traicionado una promesa con y para usté.
Lo que está haciendo conmigo es mil veces el infierno que pasé.
Soy amigo del pecado y allá voy.

(...y esa angustia se le escapa de las manos)
No me diga que he callado,
que no entiendo cuando me habla usté, mujer.
No me diga que soy tonto, que la mano
en el revolver me la colocó usté.
¿Cada cuánto me veía la sonrisa que supe tener?
Sueño el vértigo de volver a nacer.

(con tono ya claramente fisurado)
Soy amigo del pecado.
No vengo a pelear pero tengo el valor.
La muerte es un gran alivio, triste sería no terminar bien esta canción.
Le agradezco por el vicio que sació.


-------------------------------------------------------------------------------------

domingo, 3 de agosto de 2008

ayer

-------------------------------------------------------------------------------------



ayer entendí
que es la palabra escrita
la ceniza de un fuego
el cadaver de un evento
que ha pasado;

que se sostienen del aire
se dan fuerza entre ellas
las letras, como en un juego
de cómplices madrugados
diez o quince minutos antes
de tiempo.


han quedado para siempre
congeladas
las palabras que antes tuvieron
ese calor
del que vivimos entonces.

miércoles, 30 de julio de 2008

a ver si puedo

-






a ver si puedo pensar se que lo que mas conviene es empezar escribiendo sin pensar para que de golpe me descubra en pensamiento solamente quiero morirme ahora y con un motor tan malo tan negro tan tan malintencionado que es que sufra que ella sufra por la muerte que ya era inevitable pero sin querer que ella precipito de tal forma que se vuelva carga fea en sus espaldas y ya nadie pueda verla sonriendo por la meirda que ella tiene adentro suyo y que yo se que tanto orgullo le despierta



mierda pienso que cagada estoy tan triste estos textos no me alientan para nada no me ayudan no reprimen descomprimen eso es ierto pero nada de eso salva nada evita una caida que me quiero dar un poco anesteciado alguna droga algun amigo alguien que quiera acompañarme en esta triste decepcion de estar furioso sin quererlo y no poder ni convencerme porque esto es cierto nada es un juego de la cabeza todo esta pasando de verdad y es por eso que yo escribo ahora rapido como un rayo rapido y feroz y si tambien fatal escribo estas palabras que ojala me dieran fuerza dieran miedo para romper esa barrera que me impide darme un daño que destruya a algunos cuantos si pudiera...


nada cambia todo sigue siendo siempre solo tierra y si volvemos a la tierra hacemos grandes grandes cosas pero yo ya lo he sentido ya no quiero hacer las cosas que queria quiero pagar en sacrificio todas esas maravillas por UN POCO SOLO UN POCO de alegria que sentia hasta estos dias y me tiento de cortarme porque entiendo que todo esto que sentia era otra fantasia de las mias y que ella casi casi con certeza no buscaba esto y nunca supo como deshacerlo.

sábado, 19 de julio de 2008

discurso de un políticopoeta

-------------------------------------------------------------------------------------


grita la sien
da un golpe y adelanta
la imagen en el videocassete
corren por mis venas "dos carriles"
seis burbujas que demuestran
que los límites de todo son flexibles

me palpita el pulso
me palpita el ano
y me palpano el pito

jueves, 10 de julio de 2008

a Dios

-------------------------------------------------------------------------------------



Niebla alrededor,
niebla todo dentro de mí.
Saltó la térmica de mi cabeza.
No puedo dejar
de escuchar tu voz
en el contestador
que ayer ensayó una despedida.
Y si no encuentro la serenidad
entiendo que ya nada es cierto.
Y en los espacios que hay que reordenar,
en los bolsillos, siempre guardo unos besos.

El televisor a un volumen que no da más.
El humo empasta el aire y la conciencia.
No puedo olvidar
esa sensación
de querer cambiar
todo mi reino por un sueño.
Fuiste, sin duda, el mejor vicio para mí
y hoy, que te puedo dejar,
quiero caer en tus manos.
Es la ironía de un hombre que es uno más
y que ha jugado a ser dios
y a separarnos.




x:

miércoles, 9 de julio de 2008

física física

-------------------------------------------------------------------------------------



cuanto más lo pienso
más lo entiendo

la vida no sólo la tierra
es redonda

cuanto más uno va hacia el norte más al sur amanece

cuanto más uno se acerca hacia la sombra
más sale el sol
y más brillante

martes, 8 de julio de 2008

y subir y subir para luego bajar por pendientes imposibles: todas las cosas tienen fecha de vencimiento

---------------------------------------------------





cómo despertarme solo cuando ya quería acostumbrarme

cómo soportar un dolor de muerte como la muerte no me ha enseñado todavía

cómo anesteciar las percepciones que creía que eran buenas
y me muestran que pensaba como el orto como el roto como el toro


cómo descubrir en el espejo que otra vez de nuevo yo soy yo
y de nuevo pierdo
sufro
pienso
pienso y muero
muero: pienso

qué sorpresa encuentro en descubrir que soy el mismo que ha perdido
tiempo atrás el tiempo
y me despierto fracasado
y fracasante

y hoy fracaso y vuelvo

y subo
subo y caigo

caigo y muero



















paf!

viernes, 27 de junio de 2008

Gracias por venir (canción 6 - 2008)

-------------------------------------------------------------------------------------



Tengo un lugar,
una canción.
Quiero procesarlo todo porque empieza un día largo.

Elaborar
la información
(lista para utilizarse si se encuentra la ocasión).


No tengo el valor de vivir yo mismo.
Estoy demasiado lejos para hablar con vos,
y, como ves, necesito
tu opinión.


Primer lugar:
presentación.
Remera con zapatillas y Futachi al portafolios.

Sos un rockstar
en tu condición.
La gente disfruta cuando pasa el tiempo con vos.


Bien he sabido tener cierta fama de loco.
Si aguanté este tiempo fue porque vi venir
este futuro posible.

viernes, 20 de junio de 2008

La parte que me falta (canción 2008)

-------------------------------------------------------------------------------------



Tengo los ojos abiertos y dormidos;
algunas cosas que estoy viendo no son.
Si cada tanto pienso que estoy perdido
es solamente que no sé dónde voy.
Pero si algo es seguro es que todos vamos bien.
Es extraño pensar que no es al mismo lugar
y percibir, con claridad,
qué difícil es discutir de felicidad.
Todos mis nervios se confunden
y pienso que
............no va a llegar
..........................aquello que siempre esperé.

Si mi cabeza da vueltas todo el día
por laberintos propios de la razón,
nadie se espante, es mi vida preferida.
(Por la ventana el mundo es mucho mejor.)
Pero algo necesito, pues me veo caer.
Cada tanto me asusto y ya no puedo volver.
Es cierto que estoy mejor,
pero sé que enloquezco más con cada canción.
Y un día, de un golpe, se hará tarde;
absorberé
.........la sensación
.....................y ya no habrá más que decir.



.....................................................................................

jueves, 19 de junio de 2008

resignación de la conciencia / los versos

-------------------------------------------------------------------------------------



LA CONCIENCIA


tengo adentro mío un chico que me dice no perdás el tiempo en esto.


---


LOS VERSOS

pienso en algo
percibo su grandeza
veo cuánto falta para llegar


:x

sábado, 14 de junio de 2008

a Gonza (cinco macro párrafos)

-------------------------------------------------------------------------------------


me acosté a las tres de la mañana en San Fernando del Valle del Demonio convulsionado por ciertos artificios que la cabeza ejecuta sólo para recordarnos que la felicidad no se toca. Me debía una noche romántica -ayer te lo dije. Me fui a la cama a las doce de la noche; poco miento si digo que a las en punto. Con la chomba que llevé al trabajo el día viernes y un pantalón de jean, no me tapé. (Nunca me tapo.)
Si te digo todo esto es porque el día va a ser largo en este xxxxxx de la forma en que la vida va a ser larga en este mundo tan conforme con que nadie sea uno. Si TE lo digo a VOS (nótese la insistencia en el interlocutor) es porque vos me pediste palabras y porque todo todo lo que pasa se desprende de las cosas que ya hemos conversado de a poquito.

La noche dolía en mi cabeza a las nueve y siguió doliendo cada vez un poco más hasta que ahora me revienta potenciada por la bronca.

Me dormí asustado y me levanté disconforme, irreconocible. Me bañé como los condenados a muerte, intentando fijar todo cuanto hacía a mi vida en un espejo, para siempre, que está detrás de mis pupilas.
Quise fumar, y descubrí por sensaciones extrañas que estaba volviendo a ser el que era antes. ESE que no quiero ser. ESE que NO soy YO.

Espacio eterno; tiempo contínuo y lento, inevitable tiempo. La cabeza se bloquea, y no piensa en otra cosa que en que de tanto no poder pensar en lo que necesita pensar se le pasará la vida y ya será demasiado tarde. La vida la hace uno. MENTIRA. Y si me afirmo en mi grito de: mentira, es solamente porque QUIERO creerme que es mentira. Creerme que todo en la vida va a ser de un modo hermoso. Quiero creerme que no voy a estar solo. Que no soy el peor. Que tengo algo para darle a alguien.

Ya habrás deducido que siempre apunto a conformarme con las cosas para poder disfrutarlas, y de tanto conformarme con todo me olvidé de que NUNCA desde que tengo uso de las bibliotecas de mi memoria estuve conforme conmigo.

domingo, 25 de mayo de 2008

pedido (fantasmas)

-------------------------------------------------------------------------------------



que hoy que, a veces, nos visitan entre sueños,
podamos simplemente saludarlos y darles la espalda
cansada, hermética espalda
y ajena; y que al darnos
la espalda nos muestren
entonces, alegres,
algunos puntitos azules
que ya no queramos sacarles.
que podamos seguir volando ciegos de ellos
por este cielo presente, abarcable:
el techo nos corta un poquito las plumas más viejas,
pero permite ¡gracia suprema! morir viendo un mar
de nuestra ropa entre nuestras piernas.

martes, 13 de mayo de 2008

quiero cambiar el mundo

-------------------------------------------------------------------------------------



quiero escribir un grito
para espantar la duda que es el mundo
para asomar del agua la cabeza
para romper de un grito mis anteojos
y hundirme de nuevo
quiero gritar lo escrito
para que el mundo piense que no es tonto
para que alguno piense que sí es lindo
para que yo me crea de una vez
que todo mi llanto va a ser río
quiero gritar el mundo
quiero vivir un grito

(otra vez hoy convivo con la duda.)

lunes, 12 de mayo de 2008

estamos solos

-------------------------------------------------------------------------------------


alguna vez,
llegará el día,
podré descansar

refugiarme en un tiro para siempre

y será como dormir
y no perder el tiempo
envuelto en pesadillas

es verdad: estamos solos
en la hora de la muerte

sábado, 10 de mayo de 2008

¿Qué hay de malo en esta droga?

-------------------------------------------------------------------------------------



cierta mañana -esta- consumí alguna droga relativamente natural.
lo recuero: me siento a escribir
escribo un párrafo
pienso dejarlo ahí
no: sigo adelante y escribo un segundo párrafo que ya me está gustando
esto me está gustando -pienso
escribo un tercer pequeño pequeñísimo párrafo
me encanta
suena el teléfono
mi hermanita atiende lejos, en el living
se reinicia la computadora por voluntad propia
pienso que qué terrible
pienso que seguramente operará eso llamado documento recuperado
mi hermana me dice que me llama mi novia en el teléfono
voy a atenderla
le comento lo que ha pasado en la computadora
me siento feliz por estar volviendo a escribir después de tanto tiempo
comentamos otras banalidades
colgamos
vuelvo a la máquina
anoto algunas contraseñas

me resulta evidente que, si lo hubiese salvado, no estaría publicando esto. Me da tristeza, sólo pudo recuperarse un párrafo, y preferí perderlo para siempre.

domingo, 4 de mayo de 2008

influencia nueva

-------------------------------------------------------------------------------------



me lastima ver
cuánto debo escapar
para vivir bien


(hoy).

viernes, 2 de mayo de 2008

dios existe

-------------------------------------------------------------------------------------



dios existe dios existe
ya no temas dios existe
no sos vos

martes, 29 de abril de 2008

Las ratas (versos admirados)

-------------------------------------------------------------------------------------


Nunca antes
pensé en las ratas. Eran
las grises, melancólicas
nadas de larga cola
que subían
a un horizonte ajeno.
Las miraba
marchar, sin importarme,
por los altos
horizontes de los otros.
Pero ahora
las ratas no son nadas,
son el peso
que sobra en la memoria,
que chilla cada vez
que abro las puertas
del Día.
Sé que están
en este barco
interior, confundidas
con la Gracia,
atropellándola
cuando ella sale
a ver el mar,
a hablar con los marinos.

Ahora sé por qué
algunos días
son más grises
y hay más frío en un lado
del corazón a veces.
Las tenía
siempre conmigo
pero no sabían
que iba a despertar
esta mañana
pensando en ellas,
recordando quejas,
reproches que me hacía,
equivocado.

Desde hace un rato
van por mi memoria
como esperando
que se mueva el viento.
Y sus colas escriben: Todavía
hay fuego en las cucharas
de los cielos.

Héctor Viel Temperley, Poemas en el mar y en la ciudad.

domingo, 27 de abril de 2008

Siento que estoy decepcionando (canción)

-------------------------------------------------------------------------------------



(Cuando no estamos bien
cuando no estamos bien)
Todo lo extraño se vuelve malo
cuando no estamos bien.
Es mi pasado, me vuelvo malo
y no quiero correr pero lo hago.
Siento que estoy defraudándote.

Y no quiero fingir pero quiero fingir,
y es que, de lejos, me veo sentado
y no sé quién soy aquí.
Todo lo raro se vuelve malo
y no entiendo qué estoy haciendo sentado,
y, cuando grito, ¿por qué grito?

Todos tan cansados de vivir uno mismo.
Es posible disfrutar de la tranquilidad.
Es hermoso aquí poder vivir uno mismo.
Es hermoso disfrutar de la tranquilidad.

Falta capacidad espacio-temporal
para cubrir el mundo entero con estas palabras.
Mil veces quiero esperar el cielo
entre las páginas que hoy me dicen
dónde estoy y a dónde ir.

...cuando no estamos bien
siempre lo escribo para que sepas
(para que el mundo sepa) que vivo
a la deriva pero que tengo claro el objetivo
y, en algún tiro, descubriré
que el futuro es brillante.

domingo, 20 de abril de 2008

plaza vieja nueva plaza

-------------------------------------------------------------------------------------



Últimamente, cuando vuelvo,
veo las cosas como en las películas


1: (Me descubro pensando, intermitentemente, en que al volver me parece que todo ha cambiado.)

2: Es la misma pija pero con más trenes.

1: (Puta. En algún momento, a alguien le pareció que era un símbolo de prosperidad eso de tener más trenes. Una demostración de status: una manifestación de la gloria que se estaba rompiendo como una semilla. Qué figura clásica, la semilla. Puta. Cómo es importante este volver, volver a revolver, juguemos, desordenar las palabras que codifican el paisaje que tan bien nos conocemos, y volver a transportarnos en un juego viejo y nuevo a este otro mundo que parece recién hecho.)

2: Pero con más trenes.

1: (Él sabe de lo que habla. Siempre lo vi como un ser humano perfecto en su especie. Va al autodromo y camina de noche por su barrio buscando que su cara se eternice en la cabeza de los otros, de nosotros, y hoy lo veo y me parece que es el mismo, pero nunca, no es el mismo, es un nuevo viejo amigo buen amigo, sobre todo.)

2: Che.

1: (Qué. ¿Habré dicho algo?)

2: Che.

1: (No. No dije.)

2: Che.

1: (Me doy cuenta, ahora, de que me fui volando hasta este punto, a dos metros de aquel punto, a dos metros de ese amigo. Y mientras me doy vuelta y lo miro como en una película, como en una película él y como en una película yo, entiendo que me encanta ser de nuevo como era, un segundo nada más, y en ese volver que decía interpreto este descansito que ya tanto me estaba mereciendo, y sonrío, y me vuelvo hasta el banquito de cemento donde estábamos hablando hace unos meses, e imagino que el alambre ya no existe y que la gente no se mata en estos trenes, y recuerdo que ese verde es también mío y que antes yo lo aprovechaba día a día y hoy, que vuelvo cada tanto, veo como en las películas la nostalgia cayéndome por los ojos, despacito.) ¡Qué lindo es este lugar!

2: Yo soy fanático de Castelar.

1: Yo también, Gordo. (Yo también.)

lunes, 14 de abril de 2008

Milmillonesdemambos (versos prestados)

-------------------------------------------------------------------------------------



Qué difícil se torna escribir
cuando uno no tiene nada en la cabeza que decir

y mil millones de versos
en el alma.




Qué daría yo por conseguir
algún instrumento que me permitiera traducir

sentimientos, sin esfuerzo,
a palabras.

domingo, 13 de abril de 2008

Expresión (un minuto de el tiempo)

-------------------------------------------------------------------------------------



y ahora me encuentro parado en un punto
donde adelante hay cornisa
pero al mirar atrás se ha borrado
el camino que venía siguiendo

y en su sitio
el peor momento

y busco pensar mucho y más
para darle aire al tiempo
hasta lo superar
y no perder años en este lugar

viernes, 11 de abril de 2008

Esperando nacer

-------------------------------------------------------------------------------------



belleza, extraña belleza
de las polleras bailando
a un lado, al otro,
con cada saltito que es como un paso.

extraña, extraña belleza
la vida de sala de espera
y en un vértigo
poder espiar
de repente
de a poquito
todo lo que se podría y no se puede

y es saberlo
belleza, belleza extraña
ser tan flaco que poder
pasar por entre la jaula
y verme, qué desperdicio,
perdiendo el tiempo
llorando solo

belleza, triste y extraña
ser tan sumiso
y por no quebrar ese laberinto
dudar entonces de migomismo



Pensaba en la sala de espera que me apresa, en la demora que le imponemos a ciertos actos que desesperan cuando tan claros se nos presentan y nos escapan, y acabé pensando en que yo al dormirme acaso dejaba muy transparente que no quería, en el fondo, nunca quería.

martes, 8 de abril de 2008

Acabo de cortarme

-------------------------------------------------------------------------------------



¡ay! acabo de cortarme
con la palabra

otra vez.

lunes, 7 de abril de 2008

La historia de mi derrota

-------------------------------------------------------------------------------------



Me estabas contando, antes de que me perdiera, de cómo se conocieron vos y Luisa. Me dijiste que coincidieron por primera vez en Parque Rivadavia y no sé qué más; algo de que ella preguntó por un librito de Pizarnik que vos conocías, pero tampoco tomé nota del nombre ni de algún verso que se comentaron antes de que te convidara con un té que resultó estar bien fuerte. Yo, a esa altura, ya estaba medio perdido en mis cavilaciones sobre la moral y su constancia a lo largo de los siglos (y de las tantas vidas, como experimentos que se van haciendo).
Me contaste, creo, que te quemaste la lengua un poco; pero justo eso es lo que no tiene tanta importancia.
También me quedó grabada la musiquita de una frase que dijiste: papapa – papá – papapapa, que quiso decir algo así como que ella vivía bastante lejos del centro. Yo igual escuché hasta ahí y más o menos, porque un ratito después ya me había perdido en una escena que, esa sí, no me la puedo sacar de la cabeza hasta ahora. ¡Justo vos, que hace tanto que te conozco! Además, que te cortejo en secreto casi desde que te conocí: esa sí es una historia.
¡Pero igual!, que vos la prefieras a ella o a mí no es mi problema, es solamente que yo de verdad creo que me tendrías que querer más a mí. Primero, porque ella es mujer, igual que vos. Y además porque yo realmente te quiero; y ella, no creo.

Ahora no sé bien por qué (aunque un poco me imagino) vos te quedaste callada hace ya un ratito y no paraste de mirarme a la cara un segundo. Yo, por mi parte, estoy enmimismado, dándome cuenta de que me hiciste alguna pregunta, o me pediste algún consejo. Y si me pongo nerviosísimo es solamente porque sé que estas cosas, para vos, son muy importantes, y yo, la verdad, no te estoy escuchando; y cuando te des cuenta te vas a enojar un poco; y yo tampoco tengo ganas ni de discutir ni de contarte todo lo que llegué a pensar mientras charlábamos.
Pero igual me avivo de que me estás mirando a la cara, un poco por esa magia de los sentidos a la que tanto nos acostumbramos, y sé que tu expresión debe estar poniéndose más cuadrada por no entender qué cuerno me pasa, y yo mientras pensando que bueno, que no te enojes tanto porque en realidad tampoco es tan grave, y no sé cómo puedo no decirte que me perdí escuchando toda la historia de mi derrota mientras miraba una tuerca que hay tirada ahí, en el piso, a un metro de tus pies, y mientras pienso que sería una tristeza que se te perdiera así, tan cerca y tan a la vista.

domingo, 6 de abril de 2008

Desesperanza

-------------------------------------------------------------------------------------



El primer reloj
suena medio segundo
antes -o después-
que el segundo reloj.

(para colmo, la lluvia
en el techo.)





¡ay! ¡cómo pasó media hora
y medio segundo
y el café se terminó
y el sol soñante se fue apagando, un poco.

y siguen los gritos negros
brotando de las paredes!

y una lágrima mancha
la ropa que quiero
sacarme
y los versos
del jardín eterno
en el que quiero morir todos los días. y nacer, un poco.






Tanto silencio
es tanto castigo
ahora que los gritos quieren cantar.

Que no me descubran.
El frío y la noche
del fondo del mar.

Se me revuelve el estómago
como en un barco
pero estoy en casa.

poema encontrado

-------------------------------------------------------------------------------------



una cosquilla entre los pulmones
espesa la respiración
que tiene ganas de quedarse
a vivir afuera.
y el cuerpo
no sé cómo
puede vivir así
respirando sólo pensamientos
que hacen silbar el aire
como si fueran
dos labios.

y la cosquilla de berotec
sigue subiendo
y queriendo
salir.


como las semillas buscan el sol
hoy quiero llegar
al cielo.

martes, 1 de abril de 2008

Monólogo de un aniñado pensador que nunca escribe nada

-------------------------------------------------------------------------------------



Brillan los cantos de las hamacas y ningún niño juega en ellas esta tarde de calor y de sol y de alegría… y de prometedora belleza aquella la de las plantas verdes verdes como la esperanza que florece en las flores pero que también florece en los tronquitos de los árboles plantados en fila con cada uno su palo de escoba al lado como una madre rectora que no le hace falta, y también en las piedras y en los bloques de tierra seca que afea y seca las manos de una manera que sólo a los niños y a vos o a mí podría gustarnos. Yo miro, miro porque igual me gusta lo que se le deja mirar a uno cuando anda triste, porque la naturaleza parece que no se da cuenta mucho de lo mal que anda uno, y yo entonces miro. Miro y veo lo lindo primero que lo feo porque a mí particularmente y creo que a nadie nunca me gustó mucho mirar las cosas feas, y porque hace tiempo descubrí ya que las cosas que se miran y gustan pueden mirarse cien veces tal vez y nunca dejar de gustarse, pero que acaso la ciento una vez esa sí se pierda la belleza que se dejaba mirar. No digo la ciento una como de verdad la ciento uno, pero es una metáfora que espero que se entienda y que se aplica a la variable etérea, debe ser etérea, digo, que provoca que una cosa pueda gustar cien o mil veces y dejar de gustar o no dejar nunca. Yo por ejemplo miro una película y me parece que es hermosa o que es hermosa mente triste o triste mente hermosa y la puedo ver muchas veces y repensar esas muchas todo eso o pensar cosas nuevas y que siga pareciéndome hermoso o triste… pero también si me la cuentan es como ver una película nueva que en realidad no se mira sino que en realidad lo que se hace es meterla directamente en la cabeza, porque el oído pienso yo que debe tener canales directos con la cabeza como centro de control, y por eso cuando nos dicen algo aunque ni estemos prestando atención entendemos que algo de eso nos tensa un hilito del pensamiento que queda tirante hasta la inteligencia o hasta siempre si es que no la hay o no se la despierta en algún caso. Es una sensación como de qué está pasando, como de esto no puede pasarse por alto así nomás porque ya se me metió tan adentro en un segundo nada más que es inevitable sentirlo propio… y así con las palabras dichas al oído, y no busco decir que en secreto sino que al oído, nunca pasa como con las escritas o dichas a la vista o con las imágenes que son bien distintas de las palabras, con ellas no pasa eso de no acordarte de qué era que venían diciéndote, porque siempre existe ese eco como una tensión que te pide: escuchame, escuchame, y que vos no sé cómo le respondés pero para mí es importantísimo escucharlo, y ahí sí, con eso, escribirlo en un papel invisible, sin renglones ni nada, sin margen ni agujeritos ni nada, y escribirlo y ahí sí leerlo cien, no, mil, sí: mil veces. Leerlo hasta entenderlo, para que no se pierda, para que nunca más nada se pierda por el mundo de las palabras que son los pensamientos más difíciles de recordar, o los más simples o los más bellos o los más tristes.

(Esto ya fue publicado pero, por motivos de público conocimiento, reaparece.)

sábado, 29 de marzo de 2008

Decirte

-------------------------------------------------------------------------------------



Decirte
(qué difícil)
que quiero morir mientras duermo

anoche







Me veo malo
me ves malo
me ve malo
me vemos malo
me veis malo
me ven malo.

Debo ser malo.

miércoles, 26 de marzo de 2008

Escribir ya

-------------------------------------------------------------------------------------



Escribir ya no es lo mismo cuando se van pasando los sueños.
Saber que puede no pasar se empieza de a poco a confundir con no querer que pase, primero, con querer que no pase, después. Al ver que esto que era lo que más queríamos nos pierde interés se piensa entonces que no hay algo que tome su lugar y al cabo de diez minutos pensando nos inunda la tristeza.


la tristeza

otra vez
la puta tristeza

martes, 25 de marzo de 2008

Cuánto yo quisiera

-------------------------------------------------------------------------------------



Cuánto quisiera morirme
cuánto quisiera estar muerto
y poder seguir prendiendo fuego
pienso
esta parte de mi cabeza

domingo, 23 de marzo de 2008

Experimento (primera parte)

-------------------------------------------------------------------------------------



Después de las primeras veces, se repetía el experimento en Roberto como con todos los otros. Sólo se apreciaban diferencias en la situación (tan concreta en aquellos días) en que Roberto alcanzaba cada vez menos los objetivos. El experimento no era otra cosa que un recorrido que constaba de los siguientes obstáculos:
una sala de té, una mesa de billar adaptada, una salita (discreta) de proyecciones en la que se veían episodios de series clásicas de los años 70s en pantalla 4x4, un insectario con más de 300 especies, un salón de baile con muy cómodos sillones, …, …, …, … y una sala con paredes espejadas.
Se intentaba evaluar el comportamiento tanto habitual como ocasional de los perfiles durante la rutina que repiten diariamente durante el período de:
un mes. Permitiéndoseles interactuar libremente entre ellos, se sometía sus actos y sus dichos a agudos análisis de notables profesionales y sabuesos de la verdad. Se les daba a los perfiles la consigna de:
organizar su recorrido diario por el experimento de manera tal que, no accediendo dos veces en el día a un mismo ambiente (los cuales eran exactamente 10), pudieran pasar por todos ellos sin encontrar dos veces a ninguno de ellos . El recorrido se completaba al transcurrir 4 horas desde el inicio.
Los perfiles eran diez y se les había rebautizado para el proceso con los nombres de los abuelos de los productores. Este informe de la situación actual del experimento no amerita la especificación de dichos nombres, por lo que aquí se referirá a los perfiles indistintamente como:
Uno,
Dos,
Tres,
Cuatro,
Cinco,
Seis,
Roberto,
Ocho,
Nueve, y
Cero. (Aclaramos que la mención del nombre de Roberto se explicita en función de la correcta identificación del excepto Roberto.)


El Director gritaba esta tarde:
-¡Al final del primer día nosotros ya sabíamos quiénes nos habían mentido y en qué!
El Director era un hombre que tenía siempre la cara transpirada, y un poco rosados los costados como si hiciera un calor de lo más agobiante. Era bueno, sin embargo, y muchos le daban la razón:
-¡Es cierto!, no digo que no… usted fijesé, si no: ¿cuántas veces nos pasó de prever cuando se iba a armar una? Es lo que yo le digo: … estas cosas se manejan así. Se habrá cansando… y quiso dejar todo.
-Esto es distinto- interrumpió el Director-. De alguna manera Roberto lleva una idea bastante exacta del tiempo transcurrido.

Roberto se había encerrado los últimos tres días en el salón de baile, ambiente por el que le había sido indicado que ingresase al experimento, y había esperado oculto tras de un sillón de dos plazas hasta que faltaran quince, veinte minutos para el final. Para ese momento ya cada uno de los perfiles que seguían con posibilidades de alcanzar los objetivos estaban descansando en algún ambiente, mirando las puertas nerviosos de que pudiera entrar cualquiera que ya se hubiesen cruzado.
Lo cierto es que Roberto no salía de aquél ambiente y, de ese modo, no hacía sino perder, quedar descalificado, fuera.

Experimento (segunda parte)

-------------------------------------------------------------------------------------



(Se comió a todos, Roberto.)

jueves, 20 de marzo de 2008

Es un insecto

-------------------------------------------------------------------------------------



Es un insecto.
Como un mosquito. Grande,
grande.
Camina de alitas por el viento torpemente
de manera torpe torpísima.
Choca contra mi brazo y pienso
pienso
que no hay en eso más que casualidad,
eterna de tan pura.

¡Oh! No me despierten,
no me lo avisen si ha dejado un huevo
que entonces me pesan por chicos que sean.

(El huevo está ahí,
germen de vida. Nace y muere;
nace y muero.)

martes, 18 de marzo de 2008

La vez trescientos

-------------------------------------------------------------------------------------



¡Ay!; creo que
hoy cumplí la vez trescientos
al sentir cuánto me lamento
por no tener cámara
en la lente de los ojos.

martes, 4 de marzo de 2008

Eje temático: pensar el rol docente

-------------------------------------------------------------------------------------



Se nos pide silencio sin usar la palabra silencio; pienso que nos dice chicos, solamente, y con eso entendemos. Cuánto silencio ocupará el aire, que al apoyar la tiza en el pizarrón, ese punto suena.
Suena, y el ruido viaja hasta nosotros y nos dice que ya nos toca: presionando, baja la tiza y hace un rulo a la izquierda para salir a la derecha antes de volver a subir. La voz acompaña: día jueves, dice probablemente.
Es nuestro primer intento pero no sabemos reconocer aún lo esperado de nuestras imperfecciones. Lo hacemos, borramos, lo hacemos y de nuevo no nos gusta.
Algunas promesas del aula, pensamos, ya han pasado la mayúscula. Borramos.
Norma ya camina entre los bancos evaluando con sonrisas a todos los intentos. Los inseguros pensamos que seremos los últimos, o los únicos que nunca lo harán.
¡Ojalá -pensamos a gritos-, ojalá que primero durara siempre, o hasta que lo entendiera!
Al poco rato, su sonrisa nos lo explica: es un juego el firulete de la dé mayúscula.

jueves, 28 de febrero de 2008

Una fila de hormigas camina por las páginas ahora mismo

-------------------------------------------------------------------------------------



martes, 26 de febrero de 2008

Teoría del Autocontrol de todos los Placeres

-------------------------------------------------------------------------------------



Aparecimos esta mañana dos cuerpos tristes blancos muertos, enroscados uno encima del otro.
La otra noche -anoche- habíamos peleado por razones que no eran importantes pero fueron la respuesta que encontramos a ese tema que se olía en el aire justo antes de dormirnos. Recuerdo la lluvia afuera, la lluvia adentro y las palabras que, como las gotas, se sucedían unas a otras cada vez más fuertes y más graves. Recuerdo a mí mismo sentado a sus pies tan quietos que parecía dormida. Recuerdo cómo tratamos -creíamos que tratábamos- de arreglarlo todo, eso: todo, ese todo que era la furia más las ganas de la furia. Algo habría -pienso para mí y se lo digo, cada tanto- contenido en nuestros espacios íntimos, de ella o mío o de nosotros juntos, que estaría pidiendo a gritos ese clima. Lo pienso mucho y siempre siempre espero que salga y pase pronto. Que grite y calle, quiero.
Si cierro los ojos ahora creo verte y ver el marco que formaba la curva que va de mi nariz a mi ceja izquierda en esa escena. Te creo en tus amagues de auxilio; te creo que me buscas con ojos brillantes pero brillantes-tristes. Te creo que me abrazas, que me lloras, que me entiendes un poco.
A: -¿Te das cuenta, nena, de que la vida es tan horrible que hasta cuando uno está feliz sigue sufriendo así?
B: -…
A: -¿Te das cuenta? ¿Eh?
B: -Matémonos, Pedro, matémonos.
A: -…
B: -¿Nos matamos?
(Yo, que siempre sigo su corriente, un poco, con la idea de demostrarle por dónde quedaba su equivocación, consideré la opción de decirle: sí.
Sin embargo, y dada la gravedad de las circunstancias y el grado de trastorno de los participantes, le dije: no.)
A: -No. ¿Cómo nos vamos a matar? ¿Estás loca, vos? ¿Estás loca?

En mis fantasías desperté ese día -que no es este- y empecé a concebir esta idea. En ella sonreíamos los dos, juntos, buenamente juntos, y entendíamos que sí, que en realidad sí era necesario matarnos entonces y juntos y tristes y sabiendo que era el sello de una promesa que de ahora se extendía para siempre, que era nunca y se acababa exactamente en ese instante.
Y así como así, sin saberlo bien todavía, esta mañana aparecimos los dos, y éramos tristes y éramos blancos, y éramos cuerpos y blandos, muertos, y nos sentíamos juntos y viejos y nuevos, así: enroscados uno encima del otro.

jueves, 21 de febrero de 2008

Te necesito (versión septiembre 2007)

-------------------------------------------------------------------------------------



Hey! siento ese olor a conversación
que ya tuvimos cien veces,
y no quiero seguir perdiendo el tiempo con vos.
Te necesito
pero no me acompañás.

(Y yo
tengo esa simple capacidad
para olvidarme de todo el mal
que me hicieron tus caricias,
tus cosquillas.)

Así estoy! Es tan temprano y no aguanto más:
quiero enroscarme en tus besos
y de nuevo volver a ser uno con vos.
Te necesito
pero vos no me ayudás.

(Y yo
tengo esta simple capacidad
para olvidarme de todo el mal
que me hicieron tus recuerdos,
tus inventos.)

Y hoy que no engañás a mi soledad
te extraño más de lo que cualquier
palabra podría decirlo en una canción.
Te necesito
pero no te tengo más.

miércoles, 20 de febrero de 2008

Monólogo de un aniñado pensador que nunca escribe nada

-------------------------------------------------------------------------------------



Brillan los cantos de las hamacas y ningún niño juega en ellas esta tarde de calor y de sol y de alegría… y de prometedora belleza aquella la de las plantas verdes verdes como la esperanza que florece en las flores pero que también florece en los tronquitos de los árboles plantados en fila con cada uno su palo de escoba al lado como una madre rectora que no le hace falta, y también en las piedras y en los bloques de tierra seca que afea y seca las manos de una manera que sólo a los niños y a vos o a mí podría gustarnos. Yo miro, miro porque igual me gusta lo que se le deja mirar a uno cuando anda triste, porque la naturaleza parece que no se da cuenta mucho de lo mal que anda uno, y yo entonces miro. Miro y veo lo lindo primero que lo feo porque a mí particularmente y creo que a nadie nunca me gustó mucho mirar las cosas feas, y porque hace tiempo descubrí ya que las cosas que se miran y gustan pueden mirarse cien veces tal vez y nunca dejar de gustarse, pero que acaso la ciento una vez esa sí se pierda la belleza que se dejaba mirar. No digo la ciento una como de verdad la ciento uno, pero es una metáfora que espero que se entienda y que se aplica a la variable etérea, debe ser etérea, digo, que provoca que una cosa pueda gustar cien o mil veces y dejar de gustar o no dejar nunca. Yo por ejemplo miro una película y me parece que es hermosa o que es hermosa mente triste o triste mente hermosa y la puedo ver muchas veces y repensar esas muchas todo eso o pensar cosas nuevas y que siga pareciéndome hermoso o triste… pero también si me la cuentan es como ver una película nueva que en realidad no se mira sino que en realidad lo que se hace es meterla directamente en la cabeza, porque el oído pienso yo que debe tener canales directos con la cabeza como centro de control, y por eso cuando nos dicen algo aunque ni estemos prestando atención entendemos que algo de eso nos tensa un hilito del pensamiento que queda tirante hasta la inteligencia o hasta siempre si es que no la hay o no se la despierta en algún caso. Es una sensación como de qué está pasando, como de esto no puede pasarse por alto así nomás porque ya se me metió tan adentro en un segundo nada más que es inevitable sentirlo propio… y así con las palabras dichas al oído, y no busco decir que en secreto sino que al oído, nunca pasa como con las escritas o dichas a la vista o con las imágenes que son bien distintas de las palabras, con ellas no pasa eso de no acordarte de qué era que venían diciéndote, porque siempre existe ese eco como una tensión que te pide: escuchame, escuchame, y que vos no sé cómo le respondés pero para mí es importantísimo escucharlo, y ahí sí, con eso, escribirlo en un papel invisible, sin renglones ni nada, sin margen ni agujeritos ni nada, y escribirlo y ahí sí leerlo cien, no, mil, sí: mil veces. Leerlo hasta entenderlo, para que no se pierda, para que nunca más nada se pierda por el mundo de las palabras que son los pensamientos más difíciles de recordar, o los más simples o los más bellos o los más tristes.

martes, 19 de febrero de 2008

Imagen

-------------------------------------------------------------------------------------



te recuerdo siempre de pie, con los brazos flexionados de manera que pudieras agarrar las tiras de tu mochila, y con una sonrisa grande casi justo en el medio de una cara muy pequeña, o de una cara normal escondida parcialmente debajo de una boina oscura de un color incierto; aunque los dos son difusos, el color del sombrero es parecido al color del sobretodo largo. Seduce la idea de tu pelo largo medio escondido entre las solapas y la carga que llevas en la espalda. La sonrisa está adornada por un aro en forma de punto sobre uno de tus labios casi finitos, que ahora como entonces me parece que te cubre la cara con un filtro de erotismo. Es viva la imagen ya que tiene movimiento, aunque es este tan precario que podría ser tan sólo un artificio de mi mente o de un niño que juega con una computadora.
Tu recuerdo de esa tarde en la que fuimos compañeros -la única, pero a esta altura casi íntima- es probablemente una mezcla de aquella con cada vez que te he visto; agradezco que hayan sido tantas.
Te quiero. Te quiero. Pedro

lunes, 18 de febrero de 2008

La historia de mi derrota

-------------------------------------------------------------------------------------



Me estabas contando, antes de que me perdiera, de cómo se conocieron vos y Luisa. Me dijiste que coincidieron por primera vez en Parque Rivadavia y no sé qué más; algo de que ella preguntó por un librito de Pizarnik que vos conocías, pero tampoco tomé nota del nombre ni de algún verso que se comentaron antes de que te convidara con un té que resultó estar bien fuerte. Yo, a esa altura, ya estaba medio perdido en mis cavilaciones sobre la moral y su constancia a lo largo de los siglos (y de las tantas vidas, como experimentos que se van haciendo).
Me contaste, creo, que te quemaste la lengua un poco; pero justo eso es lo que no tiene tanta importancia.
También me quedó grabada la musiquita de una frase que dijiste: papapa – papá – papapapa, que quiso decir algo así como que ella vivía bastante lejos del centro. Yo igual escuché hasta ahí y más o menos, porque un ratito después ya me había perdido en una escena que, esa sí, no me la puedo sacar de la cabeza hasta ahora. ¡Justo vos, que hace tanto que te conozco! Además, que te cortejo en secreto casi desde que te conocí: esa sí es una historia.
¡Pero igual!, que vos la prefieras a ella o a mí no es mi problema, es solamente que yo de verdad creo que me tendrías que querer más a mí. Primero, porque ella es mujer, igual que vos. Y además porque yo realmente te quiero; y ella, no creo.

Ahora no sé bien por qué (aunque un poco me imagino) vos te quedaste callada hace ya un ratito y no paraste de mirarme a la cara un segundo. Yo, por mi parte, estoy enmimismado, dándome cuenta de que me hiciste alguna pregunta, o me pediste algún consejo. Y si me pongo nerviosísimo es solamente porque sé que estas cosas, para vos, son muy importantes, y yo, la verdad, no te estoy escuchando; y cuando te des cuenta te vas a enojar un poco; y yo tampoco tengo ganas ni de discutir ni de contarte todo lo que llegué a pensar mientras charlábamos.
Pero igual me avivo de que me estás mirando a la cara, un poco por esa magia de los sentidos a la que tanto nos acostumbramos, y sé que tu expresión debe estar poniéndose más cuadrada por no entender qué cuerno me pasa, y yo mientras pensando que bueno, que no te enojes tanto porque en realidad tampoco es tan grave, y no sé cómo puedo no decirte que me perdí escuchando toda la historia de mi derrota mientras miraba una tuerca que hay tirada ahí, en el piso, a un metro de tus pies, y mientras pienso que sería una tristeza que se te perdiera así, tan cerca y tan a la vista.

viernes, 15 de febrero de 2008

Secándome esas ganas de matar que yo tenía

-------------------------------------------------------------------------------------



Nadie entiende nada emilia mia nadie entiende nada nada nada entienden esos que te dicen que te quieren; cómo pueden saber cómo es quererte si no saben lo que es verte llorar mirándome a los ojos y diciéndome que te querés casar conmigo y que querés darme lo que a nadie nunca antes diste, Emilia mía hermosa mía Emilia Emilia de mis días de mis noches, de mis sueños mis vigilias de mis viajes me despierto cada día y me levanto de la cama para verte antes de irme a cualquier parte y si te escribo no es por tonto ni es por malo es solamente Emilia hermosa porque siento que te debo explicaciones por las cosas que te digo que te grito que te lloro, te disparo como tiros para hacerte un poco feo un poco sólo un poco más terrible el día Emilia porque quiero que me entiendas que me duelen esas cosas que se vuelven imborrables con tan solo consumarlas y que a veces con el tiempo se nos vuelven incurables.
Es por eso que te escribo y no es por tonto ni por malo cuando digo que te extraño que te quiero Emilia mía que te quiero entre mis brazos, para qué perder el tiempo que nos queda, para qué esperar que el tiempo nos lo explique si sabemos que la vida es esta es juntos es bonita y no es de a uno: es de a dos o es de a tres o cuatro o cinco, tal vez muchos muchos hijos nos separan y nos unen a esos nietos que esperamos cada noche cuando juntos nos dormimos y sabemos y sentimos y soñamos juntos juntos muy bien juntos y entendemos Emilia linda
Emilia siempre siempre mía
que es así

jueves, 14 de febrero de 2008

elGuegué

-------------------------------------------------------------------------------------



PERRO

Entenderá?
?cuando nos miramos?
?la diferencia que existe entre
los ojos y el resto
de esto que él ve como un yo?






……………
Lloro, luego siento
que entiendo el valor de una lágrima
en la salvación de la especie







HOMBRE

Ente
Soñante
Pensante
escribiente hecho de sueños
y pensamientos







.…………
astropípeda incorpórica
elucina de teomastia
y palupífana y guirnáldica
y ambarántica mía

la música en las palabras
y
en los pensamientos
y en
los cuerpos

el sentido está en mi alma.







Belleza

Palabras palabraS
palabras
P-A-L-A-B-R-A-S

Por toda la hoja palabras
que significan distinto
que significan lo mismo:
tu voz un vals este aire







el Guegué
.
Quedaríamos, entonces, así,
solos,
solos y quietos
solos y quietos y un poco más viejos,
entonces,
y secándonos de nuestra propia no mojadez. (Como la ropa, en el fondo.)

miércoles, 13 de febrero de 2008

Anochecer

-------------------------------------------------------------------------------------



Hey! cómo estás?, hoy te canto desde un país
donde los sueños se buscan en la verdad;
sobran melodías
cuando tu recuerdo me regala una canción.

Cómo hablar de lo que espero de tu voz?
(Inmadurez de pensar que ya ira peor.)
Siento que no alcanzo
para darte la mitad de lo que me das vos!

Y es la triste sensación
de que estoy atándote
a las fantasias que de chico yo tenía.

Hoy me despierta tu olor en mis pensamientos.
Es que pensarme sin vos me hace anochecer.
Me duermo en tu aliento,
respiramos juntos otra vez felicidad.

Me consuela saber por dónde andarás,
cerrar los ojos y ver figura punk.
Cuántas horas faltan?!
Quiero tocar con mi piel tu piel una vez más.

Sé que pronto pasará,
y que no hay nada triste en esa sensación
de estar atado a tu destino.

Hey! hace cuánto que no andabas por aquí?

martes, 12 de febrero de 2008

Escribir ya

-------------------------------------------------------------------------------------



Escribir ya no es lo mismo cuando se van pasando los sueños.
Saber que puede no pasar se empieza de a poco a confundir con no querer que pase, primero, con querer que no pase, después. Al ver que esto que era lo que más queríamos nos pierde interés se piensa entonces que no hay algo que tome su lugar y al cabo de diez minutos pensando nos inunda la tristeza.


la tristeza

otra vez
la puta tristeza

lunes, 11 de febrero de 2008

Escrito sobre una mesa de mazapán

-------------------------------------------------------------------------------------



Recibimos anoche una nota en la que se nos indicó qué hacer. No piense, sin embargo, que de aquellas instrucciones y de nuestra obediencia nació esta carta. Por suerte (para nosotros, no para usted, que nunca sabrá cuáles son realmente nuestras aptitudes), la computadora arregla todas nuestras faltas de ortografía. En realidad no son todas, sino sólo aquellas que obedecen a una regla cuyo número de sílabas es impar mayor de 26 y menor de 42. Es inexplicavle.
Se nos pidió (amavlemente, intuí) que nos dirigiéramos a ud. con motivo de referirle “vuestra (nuestra) versión de los hechos” (sic). Procedo (en nombre de los siete):
Javier se cayó de la escalera, aunque después dijeron que lo habían empujado. Lo cierto es que cayó sólo ayudado por el perro, de nombre Jorge. (La gente le dice Georgie, que se pronuncia Yoryi.) No cayó rodando sino manteniendo cierto imperfecto paralelismo con la baranda, como si se movieran por imanes.
¡Pero en esta casa no hay imanes, no! Seguro que él tuvo la precaución porque la pintura estaba fresca. Claro: Sergio había pintado la segunda mano hacía apenas un par de horas y uno nunca sabe con esas cosas. La pintura siempre es en contra del hombre.
La pintura era en realidad una mezcla de pintura gris con pintura azul, porque queríase formar celeste pero el blanco estaba feo así que se improvisó con el gris imaginando muy optimistamente (como nos gusta pensar aquí) que quedaría como el cielo de ayer. Ayer el cielo estaba nublado y parejo, parejamente nublado.
Bueno. Entonces Javier se cayó por evitar apoyar las manos en la pintura que Gabriel había pintado pero que resultó ser como un color cualquiera pero bastante sucio. Cuando cayó, el único que oyó el ruido fue Gastón, que estaba diseñando un termodisipador de partículas que nos explicó que sirve para centrifugar el mundo en el sentido inverso al natural, de manera tal que retrocede el tiempo únicamente de a un año. Nos contó también que desgraciadamente no pudo conseguir un megaswitch para el turbo, motivo por el cual atrasa cuarenta y cuatro minutos de más. Gastón se mostró descontento y decepcionado por esta falla.
Entonces Gastón lo escuchó pero, concentrado en su labor, no corrió en su ayuda. Sí, sin embargo, pegó un grito que se escuchó desde la sala de proyecciones, donde estábamos los otros cuatro, pues Emporio había salido a comprar alimento para el perro.
El perro pareció entender que nosotros le festejábamos la gracia, pues empezó a saltar moviendo la cola de manera tal que la punta de su cola describía una forma parecida a un ocho medio estirado en los extremos. El de la patada fue Marcelo, y se la dio bien entre las costillas. Georgie gimió y corrió. Facundo y yo manoseamos al caído para ver esas cosas de la respiración y el pulso y todo eso, y Javier parecía estar muerto, o desmayado, o dormido.
Dormido debía estar, porque se levantó a los dos minutos y corriendo subió a ponerse su uniforme de la policía, de cuando trabajaba.
Ojalá no lo reprendan, pensé yo, en nombre de los seis, porque a él, como sabrán, no lo dejaban trabajar por su problema.
Cuando murió la señora él andaba triste y soñaba muchas pesadillas. Yo pienso para mí que se le volvieron realidad ayer a la tarde, porque entre el cielo parejo y los gritos de Gastón, las corridas de todos, los llantos y giros en el aire del tal Jorge, la angustia contenida en su pecho, la sonrisa imbécil que puso la vieja de al lado cuando lo vio salir, el arma fría de hace años que tenía en la mano y las ganas acumuladas de pegarse un tiro en su propia cara, para mí que no supo qué hacer.
Por eso yo le pido, señor comisario, que no lo reprendan mucho. Yo entiendo que a los locos se les da otro trato y, hágame el favor comisario: trátelo como un loco. Él anda medio mal pero es por lo de la señora, y por todo lo de los otros. No es solamente por él, se lo digo en serio, yo.
Siempre agradezco, pero déjeme decirle además hoy que si no me hace el favor entonces el arma la va a sentir en la boca del culo cuando lo agarre yo o cualquiera de los cinco hermanos que me quedan a mi cargo. Muchas gracias.

domingo, 10 de febrero de 2008

Empiezo una novela que nunca terminaré

-------------------------------------------------------------------------------------



Recorre los trescientos primeros metros silbándole el aire y su musiquita al suelo, los dos pies alineados y especulando con el equilibrio que pudiera hacerse sobre el cordón de la vereda, que es como una línea. Piensa que debe tender a juntarse con la calle o con el cielo. Piensa en escribirlo.
Saluda a algunas vecinas a cuál más vieja, recuerda sus polleras durante otros doscientos metros y, finalmente, posa sus dedos índice derecho y anular derecho sobre la primera de las barras metálicas de la reja de su casa y los arrastra hasta la puerta. La casa que fue de sus padres y hoy es sólo la casa de su madre.
Arriesga, elucubra un poco y vuelve a arriesgar cuando una mirada en el espejo le pregunta sordamente los motivos del malhumor de Cecilia; no acierta. Cecilia ha llegado del puerto a las seis y seguramente una hora antes ya habrá sentido el peso del trabajo a realizar en la semana sobre los hombros apenas unos días descansados. Vuelve a cruzarla en el pasillo y no pregunta, y ofrece un té y ofrece también unas pocas galletitas que le quedaron del desayuno y que ya saca de la mochila. Comparten.
Comparten las galletitas y unas pocas anécdotas, que sirven para limpiar el aire de la cocina pero sobre todo el aire de las cabezas suya y de su madre de ese olor tan asqueroso y maloliente que todo lo envolvía. Se levantan ya riendo por algún mal chiste siempre hecho en torno de sus propias incapacidades. Caminan alrededor de la mesa redonda que han comprado unos meses antes de la muerte del abuelo, y en la reflexión que hace de aquél caminar tan de monólogo le viene a la cabeza el abuelo con su barba medio gastada de tan vista. La catarata la tenía en el ojo izquierdo. (Duda cuando se acuerda.)
Cecilia, que mira la hora automáticamente cada veintisiete minutos como por arte de magia, le avisa que se le hará tarde para la visita diaria al doctor. El doctor se llama Ramiro y canta siempre mientras lo atiende. Debe verse tan lindo mientras canta, piensa, pero no lo sabe ni posiblemente nunca lo sabrá por culpa de ese miedo que quiere volverse dolor en su cabeza pero que bien sabe que es sólo una impresión fundada en las regiones donde las pasiones empañan un poco los cristales de la razón.
De todos modos se anuda la corbata de ir al médico como le han enseñado por la mañana y sale con prisa. Como todos los días, llega temprano y se aburre en la sala de espera. No lee, no mira por el ventanal. Camina el recuerdo de sí mismo por los cordones de sus recuerdos logrando un equilibrio perfecto. Se oye la musiquita del doctor Ramiro barrileteando en el viento que sopla un dios vuelto ventilador de techo. Mente en blanco: no reflexiona; Dios existe; la vida es bella; acaso sea eterna.
Entre, entra, cierra despacio y mira. Mira todo; mira bien; mira y de tanto mirar no siente el olor a miedo que se avecina. Inconcientemente se recuesta boca abajo en la camilla y el doctor le avisa. Vuelve atrás un poco el tiempo y se acuesta boca arriba, atento. Cierra los ojos, huele; huele a pájaros podridos bajo tierra, enterrados por un perro nervioso. Se enerva. Los párpados contienen las lágrimas que su cerebro manda que broten.
Un dedo toca un labio. Siente frío.
Cierra un puño y ocupa la nada que había entre el puño y el miedo; aprieta. Grita, muerde, ruge. De a poco el llanto le sana el alma y lo acostumbra. Bendito acostumbrarse al dolor, piensa, y entiende que puede pensar y que eso también es costumbre y es miedo. Sonríe. Reflexiona sobre la actitud de no responder a la pregunta del doctor: ¿qué pasa? (Qué pregunta imbécil, doctor, correspondería.) No; en cambio, silencio y sonrisa y sensación de singularidad y hasta de superioridad: todo en este segundo prolongado. Situación de percepción absoluta del tiempo, un instante eterno, abrir de ojos segundario que atormenta de tan claro. Multiplicación de los colores: dilucidar de las fuerzas de la física óptica, leve (levísima) nostalgia de la ignorancia, visión de un choque muy, muy fuerte que rompe cada color en todos los colores. Desencanto de la vida que se conoce. Padecimiento de la propia razón, desconfianza. Llanto eterno del alma.

Se levanta y apoya sólo las puntas de los pies. Mira, y aunque no cree siente que rezar le haría morir un poco más tranquilo y que no rezar le hará morir un poco más nervioso, pero siente que morirá de todos modos. Baja la vista y ve Juan cómo la flor que está dibujada sobre la alfombra, en el centro de la habitación, se va marchitando muy de a poco.

viernes, 8 de febrero de 2008

Nocturno 01 (Canción)

-------------------------------------------------------------------------------------



Quiero escribir. Siento que te lo debo.
Espero aún estar a tiempo.
Quiero gritar lo que callé,
lo que lloré, lo que no pude ver
cuando no estabas bien.

Perdóname. Sé que siempre lo pido,
pero sabés que siento lo que digo.
Quiero escuchar tu risa al despertar,
sentir tu voz, tus besos al llegar
al final de alguna canción.


Sé que soy muy egoísta y sé aceptar
que las lágrimas no alivian más que el alma de uno mismo.
Pero me invento el aliento y me refugio del dolor
en pequeñas poesías, fantasías que yo escribo (para vos).


Quiero mirar, cuando me desespere,
mirarte y desvanecerme
hacia un lugar donde cada canción
me muestre en mí lo que yo admiro en vos,
y seamos uno los dos.

Y así perder cada uno de mis pelos
y junto a vos ponerme viejo,
y que mi voz, mi fuego al despertar,
mi devoción por lo que me enseñás
te hagan ver que soy yo.

martes, 22 de enero de 2008

Llovía

-------------------------------------------------------------------------------------



Llovía. Estábamos jugando, dejándonos soñar sueños que se sueñan despiertos. Paula contó (aunque no le creímos) que en el suyo había un árbol muy grande lleno de flores y hojas, un mantel tirado bajo su sombra, una mujer, una mariposa que se apoyaba en la punta de su nariz. Cada tanto parpadeaba más de lo normal. Evidentemente estaba guardándose una parte del sueño para ella sola. Dijo que era un día de sol, hizo sonar las uñas ocho o doce veces contra la mesa de pino y otra vez se recostó sobre el respaldo de la silla. Algunos todavía pretendíamos estar dormidos pero escuchábamos. Siempre era agradable descubrir (para algunos) que los otros también soñaban, o incluso (para los demás) que también soñaban estupideces.
Ricardo contó, también. Su sueño era más imbécil aún: ahí sí llovía; él (con el cuerpo de otro, la cara de un tercero, ...) iba corriendo desesperado, convencido de que alguien lo perseguía para matarlo; llegaba agitado hasta el borde de una anchísima avenida (“entre cinco o siete carriles para cada lado, debía tener”) que, al comenzar a cruzarla, crecía y crecía, y era cada vez más y más ancha; tan aterrado corría en el sueño que, de tanto mirar atrás, no vio que se acercaba un auto a toda velocidad que lo dejó hecho pelota (“ni siquiera llegué a soñar bien qué auto era, mirá si vendría rápido”). El sueño era eso, y Ricardo estaba plenamente convencido de que tan inmensa idiotez encerraba un significado secreto o una moraleja.
- Por estar preocupado por escaparle a la muerte por un lado... te agarró por el otro – remató Patricia con la garganta ya torpe por la hora y la curda.
- ¡Por el orto, te agarró! – algunos rieron. Yo, mientras tanto, pensaba que era una tristeza estar perdiendo el tiempo de ese modo.
Despacio, fuimos cansándonos de los sueños; alegremente, sin embargo, algunos insistieron en que debíamos completar toda la ronda. Cuando estábamos a punto de terminar me llegó el turno. Me limité simplemente a llenarme el vaso de whisky hasta arriba y me quedé observándolo con las mejillas infladas. Era divertido verme reflejado, deformado, amarillento, sabroso, de a poco, cada vez más frío y deseable y deseado. La verdad es que me daba vergüenza contar la boludez que había soñado, como me da vergüenza contarlo ahora y en todos los días de mi vida.
- Dicen que si lo cuento no se me cumple – dije, y no me tomé el whisky enseguida para no arrepentirme demasiado pronto.
Como si fuera inevitable, algunos callaron, otros cerraron los ojos, Patricia puso un disco de Piazzola y Marcelo bailó con quien pudo. En esa época nos gustaba escuchar discos hasta muy tarde, irnos a dormir bien borrachos y con las piernas sobre la almohada. No era ni rebeldía ni ignorancia, sólo cansancio. Cansancio de los mismos amigos y de las mismas situaciones, mezclado tal vez con la falta de atrevimiento para dejarlos atrás congelados como un puñado de recuerdos. Estábamos cansados pero la vida seguía su curso; hoy éramos el eslabón que seguía al de ayer; y mañana, al de hoy.
Alguna vez –esto es cierto– hice intentos desesperados por no volver a sentir nunca esa lástima de mí mismo, pero tanta puta costumbre no puede pasarse por encima con una simple voluntad. Contamos historias, damos consejos, los escuchamos o simulamos que los escuchamos; así se nos pasa la vida entre copas y cosas que nunca nadie deja escritas. Es todo pérdidas.

lunes, 21 de enero de 2008

Viaggio nel tempo

-------------------------------------------------------------------------------------



Ayer por la tarde subí a este mismo colectivo. No quiero decir que subí a uno de la misma línea; ni siquiera que subí a uno de la misma línea que tenía la misma patente que este. (Cauldfield estaba seguro de que nosotros mismos no éramos imperturbables, sino que cada cosa que nos pasaba nos hacía diferentes. Debe pasar lo mismo con los colectivos, como con las lanchas y los aviones.)
La cosa es que ayer me subí a este colectivo. Fue por la tarde, y lo aclaro para que nadie se piense que sólo pretendo sorprenderlos con una gracia estúpida como es decir que ahora son las cero horas y cinco minutos del martes en que me he sentado a escribir en el colectivo. Realmente mi proyecto es más ambicioso y considerablemente menos probable.

Como cada viaje, sólo miré mi boleto cuando estuve acomodado en mi asiento individual. Me fijé en el número, la hora; calculé a qué hora llegaría a mi casa, repasé el número y leí el código del chofer y la fecha. Después, restándole importancia (por falta de algo excepcional) a lo que acababa de hacer, miré por la ventanilla. El escenario era conocido…
Durante una de las miradas que, como relámpagos, suelo dedicar al interior del colectivo, me detuve en un boleto de nadie, que su último –único- dueño había dejado enganchado en el respaldo del asiento que estaba justo delante del mío –del nuestro. Clavé los ojos directamente en un costado de aquél boleto y percibí inmediatamente la falla. A pesar de que era de unos pocos minutos antes que el mío, tenía impresa con tinta clara la fecha de mañana. O la de hoy: el boleto dice y decía “veintiuno de octubre de dos mil seis”. El mío, en cambio decía claramente “veinte”; sin embargo, al desenrollarlo cuidadosamente descubro que el boleto que compré el lunes veinte de octubre dice ahora “veintiuno”.
Hace casi una hora, con toda la desesperación que merece mi descubrimiento dando vueltas por la cabeza, comencé a escribir que “Mañana me he subido a este colectivo”, lo que encierra serias contradicciones semánticas. Analizándolas, por suerte, di con la luz: yo no he subido en el colectivo un día después del día en que he subido; he, sencillamente, viajado en el tiempo. Inmediatamente surgen otras tantas preguntas sobre la naturaleza de mi viaje, y pienso si habré perdido las cosas que tenía que hacer ayer (ayer que era hoy) o si habrá alguna manera de realizar el viaje inverso voluntariamente.
Sonrío, tratando de engañar a los nervios que me provoca este naufragio que describo, e invoco a Holden Cauldfield (quien decía que las cosas no deben contarse nunca) mientras trato de dormir un poco.